Son las 19:30 de la tarde. aquí me encuentro, tirado en el sillón, con el ventilador puesto en marcha y viendo la tele. Fuera, el típico día de agosto en Madrid: casi 30º C a la sombra, polución, ruido, y nada, nada de roca. Apenas hace 48 horas que salí de allí y ya lo echo mucho de menos. Porque ahora, tirado en mi sillón, con un vaso de agua helada en la mano para no morir deshidratado, brindo por todo lo que me ha ocurrido este mes:
Brindo por un mes de escalada sin parar, por levantarnos a partir de las 11 todos los días y no acostarnos hasta las 2, por esos baños refrescantes en pozas de agua cristalina (y no tan cristalina otras veces) antes de subir a escalar; por toda la gente del refu kalandraka, que soportó durante un mes entero nuestras tonterías y paridas; por ese descenso con Sergio del Gorgas Negras, nuestro primer barranco que nos costo mas que cualquier vía que hayamos hecho; por Marc, Chechu y Ramón, nuestros amigos valencianos que tantos momentos buenos nos dieron, y tantas historias como la caminata por caminos de cabras o cuando se morían de hambre; por gente como el "Pinche" Enrique o Chris que han pasado con nosotros todas las aventuras vividas este mes, gente que estoy seguro de que volveré a ver algún día; Por el "Puto amo" Ramiro, que en el fondo es como el padre de todos nosotros y a Lauri por soportarnos; por toda la gente que nos ha acompañado y con los que hemos pasado buenos momentos: Esther, Pollo, Vieri, Dimitri y Ari, Carlos y su perro Patxi o por gente como Novato, Mary o Urko, ya que conociéndoles me he dado cuenta de lo que es la superación personal, el espíritu de lucha y la perseverancia.
Por la primera ascensión nocturna en desnudo integral a la Nanuk, por las "chapatitas", los "cuernos en plan metal", los "repositas", los " Tú Tú Tú Tú" y demás paridas; por la casi hipotermia que me da al ir nadando hasta la glaciere, o por esos descensos en barca por los rápidos en las pozas del camping. Brindo por días de escalada mágicos en lo que todo sale, por las heridas de empotrar y por esos reposos sin manos; Por esas fiestas improvisadas, o por los conciertazos de algunas noches; por las mejores lasagnas y hamburguesas que he comido en mi vida, por estar harto de comer pasta a todas horas. Por los pegues fanáticos que uno no olvida, en los que ya no solo el escalador, sino todo el sector lo da todo; por las caminatas de media hora al camping a las tantas de la noche, por los encadenes de resaca. Por tener que bajar del sector de escalada en chanclas, por la noche sin frontales y lloviendo, por esas partidas de billar o ping pong en las que digamos que íbamos un poco contentos. Por mi primer 8a+ y por mi primer 8b, que tanto me costaron, y por aprender a poner lo pies cada vez mejor. Hoy brindo por los descansos "activos" y por nuestras amigas de Oloron. Y como no, por el Apetrón Team, compuesto por Ramiro y Lauri nombrados anteriormente, Octavio "el coca colas", Sergio "el cervezas" Guille, el empanado del gorrito, el pantalón largo en pleno verano, los calcetines y el cabo de anclaje, y yo, el helicópteros/Sopas, nuevo apodo que me he ganado a pulso jajaja (la mayoria de motes tienen una explicación demasiado larga o demasiado vergonzosa, por lo que no me pararé a explicarlos jaja). Un grupo de amigos que yo creo que ya ha trascendido el estado de "grupo de escalada". Creo que tras este mes nos hemos convertido en algo más que un simple grupo de amigos que salen a escalar juntos, y es por eso por lo que hoy estoy contento. Porque hoy brindo por todo esto y más, hoy brindo por un pequeño pueblo perdido en la Sierra de Guara en el que en invierno a penas hay gente y en verano se llena de oleadas de barranquistas y escaladores, hoy, brindo por RODELLAR, al que tengo claro que no tardaré mucho en volver
Tal vez se podría pensar que esta ha sido una entrada corta para todo lo ocurrido en un mes, que podría hablar de mis encadenes, o no encadenes, de lo que hemos hecho, pero yo creo que este mes no ha sido solo un viaje de escalada. Para mi este viaje ha servido para darme cuenta de que la vida no debe consistir en ir a una escuela, encadenar dos o tres vías e irse a casa con la libreta llena pero el alma vacía. Este viaje ha sido especial por la gente que lo ha hecho especial, y es a ellos a quien les dedico esta entrada, incluso si mi torpe cabeza se ha olvidado de alguien también quiero dedicársela, porque sí, la libreta está bien, pero, Y lo fuertes que nos ponemos???? y lo bien que nos lo pasamos???? y lo que nos hemos podido reír?? Sinceramente, a mi eso me ha aportado más que hacer un 8b. Además, tanto guille como sergio como octavio explicaran mas cosas en sus blogs, y así como mi proxima crónica en soloboulder, que si no aqui me enrollo y esto no termina nunca.